Megan Frye nos da un recorrido por uno de los santuarios naturales más importantes de Argentina: el Parque Nacional Iberá.
En el cálido rincón noreste de Argentina, lejos de sus famosas montañas, está ubicado una historia sueño de la conservación. Aquí, deambulan, deslizan y vuelan unas especies especiales y endémicas a Argentina. Pero no siempre fue así. Jaguares, ocelotes, venados, osos hormigueros, guacamayas, nutrias y varios más están de regreso en Esteros de Iberá, el parque nacional más grande de Argentina.
Hace 40 años, casi todos aquellos animales nativos estaban a punto de extinción en esta zona, cazados por su piel, su carne, y por deporte.Este parque de más de 1,300,000 hectáreas fue fundado para conservar lo que quedaba de su naturaleza.